lunes, 14 de julio de 2014

Las Crónicas de Rapnia: la canción, el perro y el sereno.

Me quedé de Jueves a Domingo en casa de David (mi primo), él junto a su novia y parte de la familia se inventaron un campamento por el 4 de Julio para olvidar un poco el trajín de la ciudad. Yo con el día y la vida libre en Verano, me ofrecí como sereno para adelantar a solas unos cuantos pendientes. La humilde sala de operaciones está dispuesta en el cuarto del primo; el closet funge como cabina. Una clasicada!

Un AKG y una M-Box que debo todavía a Junior Polanco , unos monitores medianos KRK, y una computadora que tira pantalla azul hasta cuando prenden un bombillo en la casa de al lado. Nada de acústica para mezclar, y a los monitores hay que cogerles el truco porque de fábrica exageran un poco las frecuencias de bajo. La costumbre es hacer lo que se vaya a hacer para que una segunda persona con mejores condiciones comience la “audio-empañetación”. La captación de audio es muy buena.


La misión “Serenea una casa por el futuro del Rap”, incluía cuidar a un cachorro de nombre Blue; el perro es una mezcla de Pastor Alemán con Huskie Siberiano. Su pelaje crema y negro hace un contraste increíble con ese par de ojos azul fuego. La primera vez que lo vi, me acordé del anuncio de Tropigas: “el de la llama azul.” (Ta’ jodón eso verdad?)


Para sintetizar: 3 días y medio de mordidas, cacá, pipí y música. A Blue no le gustaba estar mucho tiempo solo, por lo que se ponía a llorar como el más llorón de los cachorros humanos. Entonces tenía yo que abrirle la puerta, coger algunas mordidas en los tobillos, cuidar que no se fuese a comer algún alambre, o, que pudiese dejar uno de esos ambientadores de chocolate en algún lugar del alfombrado. Pero es adorable!


En esa precisa soledad me apetecía trabajar en algo, pero no me motivaba mucho repasar canciones de las pendientes, mi espíritu fugaz era para comenzar algo nuevo de cero y terminarlo yo mismo. Empecé para esto a inventar buscando entre mis apuntes y notas viejas. Decenas de hojas de todos los colores y tamaños almacenadas desde hace tiempo bajo el colchón. Me las traje. Algunas sólo con alguna oración o dibujo, otras con espacio para un punto y coma (;) solamente.


Y se hizo la luz: “Mi vida es una onda en el estanque”, idea tomada de una breve reflexión escrita en casa de mi tío meses atrás. Me gustó mucho esa imagen de una gota cayendo, en aquel instante vi toda mi vida resumida en eso de la gota y la onda. “Un sonido de las luces”,  idea que nació de una nota que hice al ver un cambio en el tono de voz de un -borracho anónimo- que estaba en mi presencia jajaja. Al cambiar de la luz blanca de la sala, a la amarilla de su cuarto, me aseguró que lo que él decía se escuchaba de manera más agradable junto a la luz de su lámpara amarilla (Relatos de Brugal, tomo primero). “Ni con estatuas ni cruces”, una referencia directa a mi desapego de algunas tradiciones. Hablamos de mi.


Se sabe hasta sin saber, que cada palabra simple o construcción literaria, tiene como equivalente una imagen mental cuando se escucha o se lee. Si digo “lata de tomate”, seguramente el 90% imaginará una lata de tomate. Quizás haya un 10%  que imagine una lata hecha de tomate y por tal razón van sentirse en el derecho de crearse un Facebook, pero eso es ya otra cosa. -Quiere una pizza loco? –No mano tato.  Qué imaginaron? Los escritores trabajan día y noche construyendo imágenes de las cosas y de la nada…


 El día anterior a la misión “
Serenea una casa por el futuro del rap”,
me topé con una instrumental que me 
gustó mucho, pueden encontrarla por el nombre de PARANORML-Shapes of Jazz. Cuando la escuché me salieron las letras que van a escuchar en el desarrollo. Luego si a alguien le interesa, puedo contar ese proceso con más detalles. 


Después que tenía el muñeco armao' , me dije:
-Loco vamo a mecla eso! A lo que me respondí: -Tú ta’ loco aquí no se puede! Entonces fue cuando a Mariana se le ocurrió la brillante idea de meternos con el par de monitores al closet y trancarnos como Miguelangelo en la capilla Sixtina. Había espacio! Fue un bulto por el espagueti de cables, tenía que salir a cada rato para echarle un vistazo a Blue cuando se salía del radar. El anormal se había comido la semana previa, unas bolitas en el patio que eran veneno para ratón, estaba siguiendo un tratamiento. Anoten por ahí algo de paranoia.

En mi capilla habían cajas de zapatos, y todo lo que puede aparecer en un closet capilla, menos pintura. Me ayudé de unos cascos Beats, otros Mickey y las bocinitas de mi laptop para referencias. También les iba enviando las muestras a unos amigos extraterrestres que tengo para feedbacks. Cuando exportaba en MP3 al comienzo, algunos detalles terminaron saliéndome muy bajitos o muy altos y era cuando iba haciendo los ajustes luego de haber escuchado la muestra en las diferentes fuentes ya comprimidas por el formato. 

Carlitín y yo en el colmado de la esquina (2007)


Arte por Chris Antigua
Esta canción fue sin duda una mezcla de muchos otros factores: una conversación con mi hermano Carlitín sobre el regreso de Tempo y el rap en general; un aguacero que de vez es cuando se filtra en la grabación de manera agradable, y una serie de cosas que se van sumando y sumando y sumando... 

Tenía tiempo sin tirar material, espero que este sencillo les deje con apetito para el plato fuerte que si Dios lo permite, estará disponible muy pronto. Detalles en lo adelante!



ESCUCHA Y DESCARGA :

Infinito Orpheo -Blue-












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